IPC aumentó en agosto
La inflación subyacente de Estados Unidos aumentó 0,3% en agosto, en línea con lo esperado, mientras que el índice general subió 0,4%, su mayor avance desde inicios de año, reflejando presiones persistentes por los aranceles globales impulsados por Donald Trump y el encarecimiento de los servicios. El dato mantiene a la Reserva Federal en camino de recortar las tasas de interés la próxima semana, en un contexto donde los mercados reaccionaron con el S&P 500 abriendo al alza y los bonos del Tesoro subiendo.
Confianza del consumidor en mínimo
La confianza del consumidor en Estados Unidos cayó en septiembre a 55,4, su nivel más bajo desde mayo, reflejando un aumento en la preocupación por el empleo y las finanzas personales. Las expectativas de inflación se incrementaron a 4,8% para el próximo año y a 3,9% a mediano plazo, lo que evidencia la creciente ansiedad de los hogares frente al mercado laboral y el alza de precios, factores que pesan sobre las perspectivas económicas.
Empresas van a deuda larga
Las empresas estadounidenses están reduciendo su exposición a efectivo y trasladando su liquidez hacia instrumentos de mayor plazo, incrementando sus asignaciones a deuda del Tesoro con vencimientos superiores a 90 días —en niveles no vistos desde 2018— y elevando sus posiciones en bonos corporativos hasta un máximo de tres años. Este cambio refleja una estrategia de extender la duración de sus carteras para capturar mayores rendimientos, anticipando los recortes de tasas de la Reserva Federal y privilegiando rentabilidad sobre liquidez.
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