La economía peruana mantiene un ritmo de crecimiento estable, pero más moderado, con un crecimiento de PBI interanual de 3.18%, impulsado por los sectores agropecuarios y minero, mientras la pesca y la inversión pública cayeron. La expansión continúa por encima de las expectativas, aunque la actividad se acerca a su nivel potencial.
El BCRP mantuvo su tasa de referencia en 4.25%, con una inflación general de 1.35% y subyacente de 1.77%, ambas dentro del rango meta. La estabilidad del tipo de cambio y la caída en precios de alimentos y combustibles consolidan un entorno de inflación controlada. La balanza comercial está en superávit, con más de USD 2,500 millones en agosto, gracias a las exportaciones mineras y agrícolas. Este nivel positivo ha reforzado la estabilidad del sol peruano, que continúa apreciándose frente al dólar, apoyado también por la debilidad dólar y las expectativas de recortes adicionales de tasas por parte de la Reserva Federal.
En el plano técnico, el USD/PEN cotiza cerca de 3.36, en la parte baja del canal descendente vigente desde 2024, reflejando confianza en los fundamentos locales. Sin embargo, el inicio del ciclo electoral 2026 podría generar riesgos de volatilidad por la incertidumbre política que podrían alterar la tendencia. A nivel global, el índice DXY mantiene su tendencia bajista, afectado por la desaceleración del crecimiento estadounidense y el mayor déficit fiscal.
Factores de riesgo incluyen el riesgo político interno y electoral hacia el cierre de 2025, mientras los fundamentos macroeconómicos continúan actuando como ancla de estabilidad.
Recomendación:
Se recomienda considerar el riesgo político preelectoral, dado su potencial de revertir parcialmente la apreciación actual del sol por lo que se debería invertir en el dólar cuando se comience a notar esta tendencia. El ciclo electoral 2026 empezara en las últimas 2 semanas del año.